Un conmutador 2.5G maneja la priorización del tráfico de red principalmente mediante el uso de funciones de Calidad de Servicio (QoS), que permiten al conmutador diferenciar entre diferentes tipos de tráfico y priorizar flujos de datos críticos o urgentes sobre el tráfico menos importante. Esto garantiza que las aplicaciones esenciales como voz, vídeo o juegos reciban un trato preferencial, minimizando retrasos, fluctuaciones y pérdida de paquetes. A continuación se muestra una descripción detallada de cómo funciona este proceso:
1. Clasificación del Tráfico
La clasificación del tráfico es el primer paso en la priorización, donde el conmutador identifica y clasifica los paquetes entrantes. Esto se puede hacer usando varios parámetros, que incluyen:
--- Clasificación basada en puertos: El conmutador asigna prioridad según el puerto al que está conectado un dispositivo. Por ejemplo, un puerto conectado a un teléfono VoIP o a un sistema de videoconferencia podría recibir mayor prioridad.
--- Clasificación basada en VLAN: Si la red utiliza VLAN (redes de área local virtuales), al tráfico de VLAN específicas se le puede dar mayor o menor prioridad.
--- Clasificación basada en protocolos: El conmutador puede identificar el tráfico por su protocolo, como HTTP, FTP, VoIP o transmisión de video, y asignar niveles de prioridad según el tipo de protocolo.
--- Dirección IP o subred: Se puede priorizar el tráfico de subredes o direcciones IP específicas, lo que permite al administrador de la red dar preferencia a servidores, dispositivos o usuarios críticos.
2. Marcar y etiquetar el tráfico
Después de la clasificación, el tráfico se etiqueta con un nivel de prioridad. Por lo general, esto se hace utilizando los siguientes métodos:
--- Etiquetado de prioridad 802.1p: En el caso de tramas Ethernet, el conmutador puede utilizar el campo 802.1p en el encabezado de VLAN para asignar un nivel de prioridad (que va de 0 a 7). Los números más altos representan una mayor prioridad.
--- DSCP (Punto de código de servicios diferenciados): Para el tráfico IP, las marcas DSCP en el encabezado del paquete indican la prioridad. Los valores DSCP más altos indican una mayor prioridad para el conmutador y los enrutadores a seguir. Esta marca garantiza que los dispositivos a lo largo de la ruta de la red reconozcan qué tráfico debe tratarse como más importante.
3. Gestión de colas
La mayoría de los conmutadores modernos, incluidos los conmutadores 2,5G, implementan múltiples colas para gestionar el tráfico de la red. Cada cola puede tener un nivel de prioridad diferente:
--- Colas de alta prioridad: El tráfico urgente, como VoIP, videoconferencias o paquetes de juegos en tiempo real, se coloca en colas de alta prioridad.
--- Colas de baja prioridad: El tráfico no crítico, como transferencias de archivos, actualizaciones en segundo plano o tráfico de correo electrónico, se coloca en colas de menor prioridad.
El conmutador administra cómo se reenvían los paquetes en cada cola según la prioridad asignada. Los dos algoritmos comunes utilizados son:
--- Cola de prioridad estricta (SPQ): En este método, los paquetes de las colas de mayor prioridad siempre se reenvían primero, lo que garantiza que el tráfico crítico reciba atención inmediata. Sin embargo, esto puede provocar que el tráfico de menor prioridad se retrase si el tráfico de alta prioridad es continuo.
--- Cola justa ponderada (WFQ): En este método, se atiende a todas las colas, pero las colas de mayor prioridad reciben más ancho de banda. Esto garantiza que el tráfico de menor prioridad se siga transmitiendo, aunque a un ritmo más lento cuando la red está congestionada.
4. Ordenación y vigilancia del tráfico
La configuración y la vigilancia del tráfico son métodos utilizados para gestionar la asignación de ancho de banda y prevenir la congestión de la red:
--- Conformación del tráfico: El conmutador puede limitar la velocidad a la que se envían ciertos tipos de tráfico, suavizando las ráfagas de datos y garantizando que el tráfico crítico tenga suficiente ancho de banda. Por ejemplo, las transferencias masivas de archivos pueden limitarse para evitar que consuman demasiado ancho de banda.
--- Vigilancia: El conmutador puede imponer límites de tráfico, descartando o marcando paquetes que excedan los umbrales de ancho de banda predefinidos. Esto es útil para evitar que ciertos tipos de tráfico abrumen la red.
5. Gestión de la congestión
Cuando el conmutador detecta congestión en la red, puede tomar decisiones en tiempo real para descartar o retrasar paquetes de baja prioridad para mantener el rendimiento del tráfico de alta prioridad. Esto se hace utilizando varios métodos:
--- Detección temprana aleatoria (RED): Esta técnica implica descartar paquetes aleatoriamente de colas de baja prioridad cuando el conmutador detecta que la congestión es inminente, liberando ancho de banda para tráfico de mayor prioridad.
--- Caída de la cola: Si una cola está llena, los paquetes al final de la cola se descartan. Es menos probable que las colas de mayor prioridad experimenten caídas de cola porque se procesan más rápido.
6. Reserva de ancho de banda
--- Los conmutadores 2.5G también pueden admitir la reserva de ancho de banda para aplicaciones críticas, lo que garantiza que siempre haya una cierta cantidad de ancho de banda disponible para el tráfico de alta prioridad. Esto se puede lograr utilizando protocolos como RSVP (Protocolo de reserva de recursos) o configurando manualmente políticas que asignan ancho de banda a tipos específicos de tráfico o aplicaciones.
7. Agregación de enlaces
--- En los casos en que una red requiere más ancho de banda del que puede proporcionar un solo puerto, se puede emplear la agregación de enlaces. Esto implica combinar múltiples conexiones físicas en una conexión lógica, aumentar el ancho de banda disponible y garantizar un flujo de tráfico más fluido. Aunque esto no prioriza directamente el tráfico, ayuda a aliviar la congestión al proporcionar más capacidad para todo tipo de tráfico, incluidos los flujos de alta prioridad.
Conclusión:
Un conmutador 2.5G maneja la priorización del tráfico de red mediante el uso de funciones QoS para clasificar, etiquetar, poner en cola y dar forma al tráfico, asegurando que las aplicaciones críticas como voz, video y juegos en tiempo real reciban el ancho de banda necesario y la baja latencia. Al gestionar de forma inteligente el tráfico en función de prioridades definidas, el conmutador puede garantizar un rendimiento fluido de la red, incluso bajo cargas pesadas, lo cual es esencial en entornos con múltiples tipos de transmisión de datos simultáneamente.